Durante los últimos tres años he logrado acceder a más de ochenta mataderos. He tenido que llamar a muchas puertas, usar identidades falsas y recorrer […]
La actitud firme y desafiante de Jill era la respuesta lógica a una vida forjada en los entornos combativos de la Inglaterra de los ochenta; durante esos años la liberación animal fue un eje de resistencia que vertebró la militancia de muchos de los jóvenes que dieron forma al movimiento de derechos animales que hoy conocemos.